En esta oportunidad comienzan a aparecer los salmos de David. En cada uno de ellos, como en el salmo 101 se destacan las cualidades de Dios, por las cuales hay que adorarle. El salmista suele incluir sus inquietudes y clamores delante de Dios en cada una de sus canciones. Se puede apreciar una profunda sinceridad de su parte, pero al mismo tiempo un corazón entregado al Dios Altísimo en todos sus caminos.

En este sentido, se puede apreciar con claridad porque la Biblia dice que David era un hombre conforme al corazón de Dios. En cada uno de sus salmos no solo narra las cosas que Dios hace, narra también todo aquello cuánto piensa y siente que delante de Él no es un secreto ni su personalidad, ni sus anhelos. Sin embargo, incluye en cada caso qué debe hacer para regresar al Señor todas las veces.

Estudio del salmo 101

Contexto histórico 

Lo primero que hay que destacar qué el salmo 101 Data de cuando David era rey de Israel. Esto quiere decir que durante su reinado ya conocía el carácter del Señor con mucha profundidad y validez. Además que le cantaba sus inquietudes y reconocía sus características. En el primer versículo se destacan dos atributos importantísimos de Dios cuya palabra en el original hebreo hace referencia al amor y la justicia del Señor. Que no solo es inconmovible, sino que también deben manifestarse en el rey justo. Es decir, que eran características que Dios que David deseaba imitar en su reinado de Israel.

Igualmente, en el tradicional hebreo en el que está escrito este salmo, se habla de la integridad de corazón con la cual David quiere conducirse. Esta palabra específica hace referencia a seguir los dictados del corazón y a una similitud entre lo que hay en el corazón y lo que se observa con los ojos. Esto quiere decir que la integridad del corazón puede estar relacionada con lo que el creyente acostumbra a mirar. Y que al conducirse en su casa sin que haya perversidad, tiene que ver con tomar la decisión activa de ponerse como meta que no haya nada oscuro ni pecaminoso frente a sus ojos.

Salmo 101 explicación

El salmo 101 habla extensivamente de cómo se debe honrar verdaderamente el amor y la justicia de Dios. David comienza explicando que desea cantar a esas cualidades y añade que no solo quiere cantar, sino que desea ser perfecto como Él es perfecto.

Es aquí cuando comienza a narrar cómo puede transitar por el camino de la perfección de manera exitosa. Pues de acuerdo a lo que sabe del Señor, un hombre perfecto ante sus ojos cuenta con las siguientes características narradas a lo largo del salmo:

  • Se conduce con integridad en su propia casa, es decir, que no comete pecados en su hogar. No es un hombre violento, grosero o diferente al que es afuera, sino que es transparente en su corazón.
  • Tiene como meta andar en santidad, así que está consciente que si quizás la santidad puede no alcanzarse en un solo día, se esfuerza por mantenerse lejos del pecado y vuelve sus ojos al Señor cuando lo hace. 
  • Aborrece a los desleales y los malvados, de manera que impide que sus malas costumbres le corrompan. 
  • Se aleja de las intenciones perversas, no se presta para ofrecimientos malvados y aleja de su corazón todo deseo que pueda convertirse en maldad. Esto es una posición activa que debe tomarse cada día.
  • No se presta para chismes, sino que defiende al calumniado, acabando con los rumores y permitiendo que reine la verdad, la paz y la justicia.
  • No soporta la presencia de altivos y orgullosos, porque delante de ellos su corazón es como el de un idólatra que cree que la opinión de ellos debe ir por encima de la de Dios.
  • Anda con los fieles de la tierra, de manera que juntos puedan servir a una causa justa y sin dobleces. 
  • No cobija a quienes mienten y engañan, para evitar a toda costa que sus engaños se conviertan en los propios. Además, no permiten que los que estén cerca de él hablen falsedades ni irrumpan en injusticias.

Todas estas características no solo hablaban de David como hombre justo y adorador, sino como rey de Israel que debía impartir justicia. En este sentido, la profundidad de su carácter y su necesidad de justicia eran lo que lo llevaban a actuar como Dios frente a Israel, con un carácter amoroso, pero siempre fuerte, firme y recto. Precisamente a esto es a lo que se refiere cuando habla de la integridad de corazón que menciona en los primeros versículos. Que en todos sus caminos como rey no se conociera corrupción ni pudiera ser relacionado con mentiras y falsedades. Por el contrario, que todo cuando se dijese de él fuera totalmente recto, justo y puro como si del Señor mismo se tratara.

Aplicación del Salmo 101

¿Para qué sirve el salmo 101?

Aunque alcanzar el carácter perfecto que David describe en el salmo resulta difícil, no es imposible en absoluto. De hecho, es importante destacar que en el antiguo testamento el Espíritu Santo descendía para inspirar a los siervos de Dios, pero en la actualidad, el mismo Espíritu mora dentro del creyente y le dota de todo lo que necesita para alcanzar la rectitud que Dios desea.

Salmo 101: significado

Esto quiere decir que el anhelo del creyente debe convertirse en anhelar un carácter así de justo y así de recto. Que ninguna de sus amistades se confiera en falsedad, sino que en su presencia todos hablen lo bueno, lo justo y lo puro, porque como agente de cambio, el entorno varía de acuerdo a la fortaleza de su influencia. De hecho, es posible que la influencia del creyente sea tal, que las personas reconozcan la imagen de Dios en Él y se arrepientan de su forma de vivir.

Precisamente este es el estilo de vida justo que narra el Rey David y que es necesario cada día para un creyente que desee presentarse perfecto delante de Dios.

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